Si uno muere, el pensamiento primigenio queda en los demás.

 

LA IDEOLOGIA DEL PROLETARIADO PERUANO
El Presidente Gonzalo, el pensamiento gonzalo
y el renegado Guzmán

 

 Tras 2 décadas de ardua labor ideológica y política, el Partido Comunista del Perú, ya reconstituido y dirigiendo un amplio contingente de comunistas y revolucionarios, proclamó la rebelión se justifica y dio un golpe político de gran trascendencia al señalar que el Poder nace del fusil. El PCP convocó al pueblo, principalmente al campesinado pobre, a ponerse en pie armadamente, a encender la hoguera y estremecer los Andes; convocó al pueblo a escribir la nueva historia en los campos y recovecos de nuestra tumultuosa geografía; a derrumbar los podridos muros del orden opresor; a conquistar las cumbres y asaltar los cielos con la fuerza del fusil para abrir la nueva aurora.

Así es como se dio inicio a la lucha armada el 17 de mayo de 1980. Lo que siguió fue el desarrollo de planes estratégicamente centralizados y tácticamente descentralizados que se desarrollaron a través de campañas para cumplir con la tarea de conquistar el Poder con las armas en las manos; es decir, se inició la destrucción del viejo Poder, lo que implica, necesariamente como contraparte, la construcción del nuevo Poder, del nuevo Estado.

En 1981, el PCP definió el pensamiento maotsetung como maoísmo; y, en la II Conferencia Nacional, a inicios de 1982, lo estableció como tercera, nueva y superior etapa del marxismo.

En medio de la guerra popular y luego de una serie de eventos partidarios, entre 1988 y 1989, se desenvolvió el I Congreso del PCP en 3 sesiones Plenarias del Comité Central.

En dicho Congreso, en medio de una intensa lucha de 2 líneas, se hizo el balance del camino recorrido desde la década del 60 hasta el inicio de la lucha armada y se lo definió como justo y correcto; también se analizaron los 9 años de lucha armada, su situación, desarrollo y brillante perspectiva. Se sancionó la línea política general, el Programa, el proyecto del Programa concreto, el esquema de los Estatutos y un esquema sobre los problemas de la historia del Partido. Se acordó aprobar los informes de la sesión preparatoria, el informe resumen sobre Construcción, sobre la campaña de rectificación y sobre el Programa concreto. Se acordó la publicación de una serie de documentos, por ejemplo: Contra el revisionismo; Sobre la Izquierda Unida; Situación política nacional; Situación política internacional; Viva el maoísmo; Proceso del marxismo-leninismo-maoísmo; Lecciones sobre Construcción y Documentos sobre Construcción.

Se hizo una selección de los miembros titulares, suplentes y candidatos del Comité Central; se seleccionó a los miembros del Buró Político; a los del Comité Permanente y, lo más importante, se nombró al camarada Gonzalo, que hasta entonces y desde 1979 era Presidente del Buró Político, como Presidente del Partido Comunista del Perú. El Congreso reconoció, oficialmente, el pensamiento gonzalo y, para unir ideológica y políticamente a todos los organismos del Partido para la conquista del Poder como perspectiva, estableció la base de unidad partidaria: la ideología, el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento gonzalo, el Programa y la línea política general, con su centro la línea militar.

Se acordó desarrollar una campaña de rectificación ideológica y política cuyo objetivo fue fortalecer y desarrollar el Partido para conquistar el Poder y construirlo mediante la guerra popular limpiando el Partido para ajustarlo a la base de unidad partidaria. ¿Por qué? Porque la base de unidad partidaria está estrechamente relacionada con la lucha de 2 líneas; sin esta base, con sus 3 elementos, no hay sustento para la construcción ideológico-política del Partido; y sin lucha de 2 líneas, no hay base de unidad partidaria.

El pensamiento gonzalo, al ser reconocido oficialmente en el I Congreso del Partido Comunista del Perú, dejó de ser el pensamiento guía del Presidente Gonzalo y pasó a ser propiedad intelectual del proletariado y de las masas de nuestra patria; no es un título de propiedad privada ni gloriosa condecoración por servicios prestados; no, simple y llanamente fue la constatación de que el proceso revolucionario, por necesidad y casualidad históricas, generó ese pensamiento; y llevó el nombre del Presidente Gonzalo porque, precisamente, fue él quien, en la aplicación creadora del marxismo-leninismo-maoísmo a las condiciones concretas de la realidad peruana, dotó al Partido y a la revolución de un pensamiento que los guiara.

El pensamiento gonzalo se plasmó como un pensamiento marxista —en sus 3 partes integrantes: filosofía (materialismo dialéctico y su aplicación a la sociedad), economía política proletaria y socialismo científico—, que se forjó durante años en medio de la lucha de clases; en la lucha por enarbolar, defender y aplicar el marxismo-leninismo-maoísmo; en la lucha por retomar el camino de Mariátegui y desarrollarlo; en la lucha por reconstituir el Partido y, principalmente, en la lucha por iniciar, mantener y desarrollar la guerra popular en el Perú sirviendo a la revolución mundial y a que el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente el maoísmo, sea en la teoría y en la práctica su único mando y guía teniendo en cuenta que si falta una de estas imprescindibles etapas constitutivas, simplemente no hay marxismo. En la lucha de 2 líneas, se forjó combatiendo y aplastando el revisionismo y las líneas oportunistas, tanto de derecha como de «izquierda», defendiendo la línea proletaria.

Para comprender mejor el pensamiento gonzalo hay que partir del contexto histórico y ver la base ideológica que lo sustentó; es necesario precisar su contenido, es decir, la línea política general cuyo centro es la línea militar que apunta al problema del Poder, de su conquista. El Presidente Gonzalo, aplicando el materialismo dialéctico a la cuestión de la violencia revolucionaria, resumió las leyes de la guerra, de la guerra revolucionaria en general y de las leyes específicas de la guerra revolucionaria en nuestra patria. Esto es clave porque apunta a profundizar las particularidades de la revolución peruana, lo específico y propio que debemos desarrollar dentro de la perspectiva de conquistar el Poder. No es calco ni copia, es creación heroica, no es un recetario inamovible, para ser loado y recitado mientras que en la práctica se desparrama un podrido revisionismo que cubre de lodo el honor de los gloriosos militantes, combatientes y masas que entregaron su valiosa sangre por la revolución. Así, el pensamiento gonzalo, no es un objeto de propiedad privada ni marca registrada para usufructo personal de nadie.

Lo básico del pensamiento gonzalo es que en él se encuentra una profunda comprensión de la sociedad peruana que tiene como centro el problema del capitalismo burocrático; que vio la necesidad de reconstituir el Partido para conquistar el Poder y defenderlo con la guerra popular. Sin marxismo-leninismo-maoísmo no se puede concebir el pensamiento gonzalo ya que éste es la aplicación de aquél, como verdad universal, a las condiciones concretas de la revolución peruana; de ahí que el pensamiento gonzalo fuera específicamente principal para el Partido Comunista del Perú y la revolución que dirigió. Aquí hay que tener en cuenta que la clave está en la comprensión del proceso histórico del desarrollo de la ideología del proletariado, de sus 3 etapas plasmadas en marxismo-leninismo-maoísmo y del maoísmo como la principal. Ésta es su base ideológica dentro de un claro contexto nacional e internacional. El pensamiento gonzalo brilló por su solidez teórica, por la comprensión de la historia y por el buen manejo práctico de la política. En la teoría se destaca el cómo comprende y aplica las 3 partes integrantes del marxismo; la importancia que da a la filosofía marxista, la necesidad de formarse en ella y especialmente la aplicación de la ley de la contradicción al estudio de todo problema, apuntando siempre a definir el aspecto principal y el proceso de las cosas; en economía política, la comprensión de las relaciones de explotación y muy especialmente del capitalismo burocrático, que madura las condiciones de la revolución, y la repercusión de la guerra popular en la base económica, así como su atención a las relaciones económicas del imperialismo buscando sus consecuencias políticas; en socialismo científico, cómo centra en la guerra popular y su concreción en el país, cómo tiene siempre presente el problema del Poder y, particularmente, su plasmación y desarrollo como nuevo Poder, como nuevo Estado. La parte más sustantiva y desarrollada del pensamiento gonzalo se encuentra en la línea política general del Partido, que necesariamente debía desarrollarse según las nuevas circunstancias, y sus 5 elementos —línea internacional, línea de la revolución democrática, línea militar, línea de construcción y línea de masas—, siendo el punto de partida de esta sustentación, y haciendo un valioso aporte a lo planteado por Mao, cómo comprende y mantiene firmemente el rumbo del Programa, la militarización de los Partidos Comunistas y la construcción concéntrica de los 3 instrumentos de la revolución.

Así pues, lo fundamental en el pensamiento gonzalo es el problema del Poder; en concreto, la conquista del Poder en todo el país a través de la violencia revolucionaria como parte de la conquista del Poder para el proletariado a nivel mundial; conquista que sirve al establecimiento de Repúblicas Populares y, principalmente, a instaurar la dictadura del proletariado porque sin ella no se puede marchar hacia el comunismo; todo bajo la conducción de Partidos Comunistas, con ejércitos revolucionarios de nuevo tipo, mediante la guerra popular y con el desarrollo de revoluciones culturales. Éste es un punto clave que muchos tratan de ocultar o negar.
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Doc en PDF (7 págs. en A5)

 

 Ediciones Bandera Roja
24 de septiembre de 2021